Desde Izquierda Unida – Los
Verdes Zafra estamos totalmente en contra de la figura de Reinas y Damas, así
como de la nueva figura de Míster y Caballero que implantan este año desde el
Gobierno Socialista, en nombre de la igualdad (dicen).
Por supuesto, no estamos en
contra de las y los jóvenes que se han presentado a ello, sino del gobierno
local que fomenta estas prácticas sexistas, en contra de los principios del
Plan de Igualdad Regional, así como las diversas leyes de igualdad existentes
(regional y estatal). Estamos ante una tradición rancia y anticuada,
anacrónica, que promueve los estereotipos de género y la cosificación de
aquellas personas jóvenes que se presentan al cargo. Es, sin más, un premio a
la normatividad y la falta de diversidad, adjudicando roles tradicionales a
quienes representan estas figuras.
Desde el gobierno local han
entendido mal el concepto de acciones positivas y, para corregir esta situación
patente de desigualdad, han considerado cosificar también al hombre joven
(ahora con el rol de Míster y Caballero), en vez de dejar de cosificar a las
mujeres jóvenes. Se premia el físico, el saber estar, el hacer bonito, en vez
de premiar otros valores que son importantes para el desarrollo de las personas
jóvenes. En vez de hacer un homenaje, por ejemplo, a todas las personas que
cumplen en este año la mayoría de edad, hemos preferido seguir con una
tradición que esconde un culto al físico y la popularidad.
Esta tradición no es el único culto a la cosificación en la
Feria Internacional Ganadera. Las personas auxiliares de eventos (catalogadas
erróneamente como azafatas/os) siguen apareciendo en femenino en el tablón de
anuncios del Ayuntamiento (con el término Azafatas), siendo igualmente una
profesión que tradicionalmente han desempeñado las mujeres. Trabajadoras a las
que, como ya denunciamos el año pasado, se les facilita un protocolo sexista y
anticuado, donde se determina que deben vestir con falda, maquillarse, lucir
atractiva, congeniar con sus compañeros de trabajo pero sin relaciones
demasiado personales que puedan dar lugar a tener malas interpretaciones, etc.
Desde Izquierda Unida estaremos pendiente de si, como afirmó el Equipo de Gobierno
el año pasado, realmente se va a modificar dicho protocolo desde la perspectiva
de un lenguaje inclusivo y no sexista, como exige la legislación a las
entidades locales y cualquier Administración Pública.